Ciudad de México. La celebraciones de Halloween y Día de Muertos han sido un contraste en nuestro país; el primero de origen celta, influenciado de Estados Unidos a México a inicios de los años 80’s, en el que se acostumbra pedir “dulce o trato” de casa en casa disfrazados de algún popular personaje de terror. En caso de que no se diera el “dulce” se acostumbra una travesura al propietario de la vivienda.
En cambio, el Día de Muertos, se celebra particularmente en México, siendo esta una de las celebraciones más grandes que tiene el País ya que se conmemora a los Fieles Difuntos a los que se les lleva alimento, bebidas, y también sus pertenencias que en vida amaron. Estos festejos varían en cada estado y se realizan en los miles de panteones que existe en el territorio nacional.
¿De dónde viene cada tradición?
Halloween
En el caso de Halloween, su celebración se remonta a las celebraciones de los antiguos celtas, quienes acostumbraban a realizar grandes festejos por el “final de la cosecha”. Esta fiesta fue bautizada como “Samhaim”, que significa “el final del verano”, y durante ella se despedía al Dios del Sol, Lugh.
Los celtas creían que en esta celebración los espíritus de los muertos regresaban al mundo de los vivos por lo que acostumbraban a hacer grandes banquetes para recibirlos y dejar dulces a las afueras de las ofrendas, al igual que encendían veladoras para iluminar el camino de los muertos. En la noche del 31 de octubre se realizaban rituales para purificar las almas y despedir el año.
El crecimiento del catolicismo influenció en estas festividades y pasó a ser llamada como “La víspera de Todos los Santos”, que en inglés es “All Hallow’s Eve”, creando así la palabra “Halloween”. Esta festividad se celebra en diversos países como Irlanda, Inglaterra, Escocia, Francia y Estados Unidos.
La influencia de Estados Unidos en México ayudado por la televisión y el cine creció la cultura de celebrar Halloween en México por lo que actualmente se está arraigando como una tradición en el norte del país. Cada año miles de jóvenes e infantes mexicanos salen a la calle para celebrarlo.
Día de Muertos
El Día de Muertos se celebra del 1 al 2 de noviembre en México, y se remonta a la combinación de los rituales religiosos católicos traídos por los españoles y las tradiciones que los pueblos originarios de México realizaban en los tiempos prehispánicos. Los mexicas, mixtecas, texcocanos, zapotecas, tlaxcaltecas, totonacas y demás pueblos originarios de México, mudaron la veneración de sus muertos al calendario cristiano, coincidiendo con el final del ciclo agrícola del maíz.
En este día se rinde culto a la muerte, en el que se recuerda a la cultura prehispánica que cuando se moría una persona era enterrado envuelto en un petate y sus familiares realizaban una gran fiesta para guiarlo en su recorrido al Mictlán, que es el inframundo de la mitología Mexica.
Se cree que las almas de los difuntos regresan a casa, al mundo de los vivos, para convivir como lo hacía en vida con sus familiares y comer de los alimentos que se les ofrece en los altares.
Miles de familias mexicanas acostumbran colocar ofrendas y altares decorados con flores de cempasúchil, papel picado, calaveritas de azúcar, pan de muerto, mole o algún platillo que en vida amaban sus difuntos.
Las personas acuden a los panteones de cada pueblo de México y adornan las tumbas de sus difuntos. Para que el ánima pueda llegar al mundo de los vivos, los mortales tienen que esparcir pétalos de flores de cempasúchil y colocar velas trazando el camino que van a recorrer para que las almas no se pierdan y lleguen a su destino. Tradicionalmente este camino se realiza desde el hogar de los familiares hasta el panteón en el que descansan sus seres queridos.
Esta celebración varía por cada estado de la República Mexicana en el que se destaca a Oaxaca, Michoacán, Puebla y Ciudad de México. La UNESCO declaró en 2008 esta festividad como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
