Culiacán, Sinaloa.- Durante la primavera y el verano aumenta la temperatura ambiental, factor que favorece la descomposición de la comida y el crecimiento de microorganismos, por lo que es indispensable tomar precauciones en la compra, proceso y almacenamiento de los alimentos para mantener su inocuidad, evitar la contaminación cruzada y cuidar la salud.
El comisionado Jorge Alan Urbina Vidales subrayó que los alimentos pueden contaminarse de manera física cuando materiales se desprenden de utensilios de cocina o por el cabello de quien prepara la comida, de forma química por la presencia accidental de alguna substancia como detergentes o productos de limpieza, y por vía biológica, por las bacterias que se pueden reproducir en el alimento y que son factor de contaminación cruzada con otro alimento.
“La contaminación cruzada es lo que ocurre cuando bacterias, virus, parásitos o cualquier microorganismo se transfiere involuntariamente de un objeto a otro, siendo el ejemplo más común la transferencia de bacterias de alimentos crudos o sin desinfectar hacia alimentos cocidos que están listos para el consumo humano. De hecho, esta es la causa de la mayoría de las infecciones transmitidas por los alimentos”, comentó.
Explicó que las bolsas ecológicas o reutilizables -que se han popularizado con el propósito de contribuir a la conservación del medio ambiente- pueden ser factor de contaminación cruzada si no se usan adecuadamente. “Se deben seguir las recomendaciones emitidas para su uso seguro”, apuntó.
La contaminación más común es de alimento a alimento pero también puede ser de persona a alimento cuando no se hace un correcto lavado de manos y de objetos a alimentos, como cucharas, trapos y tabla de picar cuando están contaminados.